La fe de los seguidores...
Imposible transcribir todo el contenido, y aún menos la gracia y
sencillez de su lenguaje. Fue un rato de interpelación a la fe personal.
Abordó tres puntos:
La fe postpascual: es sólo gracia, don
recibido.
La fe prepascual: se apoya en las
propias fuerzas
Y la fe de Pedro: pasa por las
dos fases
En el Evangelio hay ausencia
total de idealización.
¡Son de un ramplón!
La idealización paraliza y
amarga.
La fe postpascual recupera la
historia de Jesús. La
Resurrección es lo que le da un vuelco radical a la fe.
El
encuentro del resucitado y la venida del Espíritu Santo.
El peligro de la fe es
transformarle en una supermoral.
El encuentro les hizo
experimentar, a los apóstoles, que ellos solos no iban a ningún sitio…experimentan el Espíritu.
Pedir “Señor que yo tenga esa
experiencia”. La fe cristiana se hace anuncio a raíz de la experiencia del
Resucitado. Cuando quieren elegir a otro apóstol ponen como condición “que sea testigo de su resurrección”
Chércoles recuerda actitudes que
son incompatibles con la fe:
La soberbia, porque es la persona la que se pone como referente.
La exigencia (sólo se os dará un signo: Jonás) y la curiosidad (ej. Herodes) (No confundir
con el deseo de saber)
El temor (el miedo no deja que la fe sea firme) y la duda hacen también imposible la fe.
“Por qué tenéis miedo, hombres de poca fe”
La inconstancia Luc. 21 “con vuestra perseverancia, manteneos de pie
ante el hijo del hombre”
La incredulidad radical
Marcos 6.
Jesús no obliga: primero hace
pensar y luego dice “si quieres”. Libertad
Hay una disposición previa Mar
11 “creed que lo habéis obtenido”
Un detalle muy bonito es que Jesús
en un momento acepta la fe mágica: cuando la hemorroísa le toca el
manto… Jesús responde desde esa perspectiva mágica.
Dice Gandhi que Dios es un dios
personal para los que lo necesitan.
También existe la fe milagrera,
(aquí no en sentido peyorativo) Cuando cura a los diez leprosos Luc 17. Los
otros se han curado, al que vuelve
le dice “tu fe te ha salvado”
La fe nos abre a la adoración (el
centurión, la cananea)
La fe está para salvar a la
persona, no a la dolencia.
Si sólo queremos aprovecharnos se
pierde la reciprocidad. Esa es la fe que engancha y es respuesta personal.
Otro punto tratado fue Jesús ante la fe de los demás. Él se
lleva sorpresas, los que oficialmente deberían tener fe no la tienen y los no
judíos sí: El centurión, la cananea, los soldados ante la cruz
Otros obstáculos para la fe: el poder, porque la buena noticia no es poder.
La riqueza. El joven rico, la sexualidad Mat 19 repudiar ala mujer…
Jeremías 18,18
El sacrificio, cuando habla de su
pasión…
El seguimiento es la culminación de la fe. No hay programación.
Y terminó con la fe de Pedro.
Gira en torno a las negaciones.
Al principio un encuentro fortuito, una elección con una misión “serás pescador
de hombres”… llevan a Pedro al engreimiento.
En el lavatorio de los pies, no
empezó por él…”y cómo me vas a lavar tú a mí”
“Esta noche todos me negaréis”…”estos
sí pero yo no” Y en el huerto saca la espada, hasta que todo se derrumba ante
los comentarios de las mujeres. Dios no entra en una respuesta engreída nunca.
Hasta que en Tiberiades Jesús le
pregunta “me amas más que éstos”
La respuesta es la gracia después
de las negaciones: “Tú sabes que te quiero”.
Ya no se apoya en la suficiencia
de antes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario