domingo, 10 de marzo de 2013

¿ORACIÓN DE PETICIÓN?

CREO QUE LA REFLEXIÓN DE FRAY MARCOS (aparecida en fe adulta) PUEDE AYUDAR A DAR  MÁS SENTIDO A TANTAS PETICIONES COMO A VECES SE DIRIGEN A DIOS... No sé a vosotros que os parece....


ORACIÓN DE PETICIÓN

Escrito por  Fray Marcos

¿QUÉ SENTIDO TIENE LA ORACIÓN DE PETICIÓN?
A la atención de Fray Marcos.
Buenos días. Todas las semanas leo tus comentarios al Evangelio del domingo, con los que sintonizo plenamente. Después de leer el correspondiente al día 3 de marzo, ha vuelto a surgir en mí el tema de la oración, que cíclicamente me cuestiono. Y por eso me tomo la libertad de consultarte.
Como bien dices en tu comentario: "...Resulta que Dios, por ser "acto puro", por estar haciéndolo todo en todo instante, no puede hacer nada en concreto. No puede empezar a hacer nada, porque una acción es enriquecimiento del ser que actúa, y si Dios pudiera ser más, antes no sería Dios. Tampoco puede dejar de hacer nada de lo que está haciendo, porque perdería algo y dejaría de ser Dios..."
Entonces, ¿qué sentido tiene la oración de petición?
Muchísimas gracias por tu atención.
Mar
Si haces la oración para informar a Dios de alguna carencia, no tiene ningún sentido.
Si la haces para cambiar la actitud de Dios y que se ponga de tu parte, no tiene ningún sentido.
Si la haces pensando que, por ser buena, Dios tiene que hacerte caso, no tiene ningún sentido.
Podíamos seguir poniendo condicionales hasta el infinito, y la respuesta sería siempre la misma.
Pero toda oración, también la oración de petición, es mucho más que una petición. Solo el hecho de acordarnos de Dios es ya algo muy positivo. Pero si además reconocemos nuestras limitaciones y que Él está más allá de nuestra contingencia, si descubrimos que está por encima de nuestras pequeñeces y está siempre de nuestra parte, pero no para sacarnos las castañas de fuego, sino como trasfondo que puede dar sentido a mi sufrimiento, entonces la oración de petición puede ser un apoyo muy importante para seguir creyendo y confiando, a pesar de unas circunstancias adversas.
El contacto con Dios puede ayudarme a afrontar una situación difícil y hacer todo lo que esté de mi parte para superarla. Es más, puede hacerme ver que, pase lo que pase, mi obligación es superarla.
Así, la oración de petición es útil, precisamente porque Dios no responde a mis requerimientos. Esto me puede ayudar a dejar a Dios ser Dios y tratar de conformarme con ser criatura. No tiene ningún sentido pedirle a Dios que me saque de mis limitaciones, porque dejaría de ser criatura.
Si creo que Dios ha escuchado mi oración y me concede esto o aquello, mi actitud materialista ante Él no cambiará, y aunque crea que me ha hecho un favor, mi salud espiritual seguirá siendo infantil.
Sigue rezando, pero, cuando hagas oración, trata de escuchar tu misma lo que dices a Dios. Descubre tus carencias, acepta tu limitación y trata de tomar conciencia de que Él está en ti para que tú puedas superarlas.
Un abrazo,
Marcos



¿PUEDE SUFRIR DIOS?
A la atención de Fray Marcos.
El texto siguiente pertenece a tu comentario al evangelio de este domingo.
"Pero resulta que Dios, por ser "acto puro", por estar haciéndolo todo en todo instante, no puede hacer nada en concreto. No puede empezar a hacer nada, porque una acción es enriquecimiento del ser que actúa, y si Dios pudiera ser más, antes no sería Dios. Tampoco puede dejar de hacer nada de lo que está haciendo, porque perdería algo y dejaría de ser Dios."
No es la primera vez que haces estas o similares afirmaciones. Pertenezco a una comunidad de base. Y hemos comentado varias veces esas expresiones.
La definición de ACTO PURO referida a Dios, pensamos que no debería utilizarse. Hace unos días en el libro "El Rostro Humano de Dios" el teólogo González Faus rechaza expresamente esa expresión referida a Dios. José Mª Castillo siempre ha rechazado cualquier tipo de "definiciones" referidas a Dios como p.e. Todopoderoso, etc.
Si Dios es "Acto puro", todo lo tiene ya hecho, ni puede sufrir (aunque sea un antropomorfismo) con los que sufren (aquello de "tuve hambre, y me disteis...") ni puede tener deseos, porque eso -como se afirma en ese texto- supone una imperfección. Por este camino llegamos al Dios impasible.
Puede que estemos equivocados, o que no hayamos entendido el sentido de esas afirmaciones teológicas. Pero... ¿merece la pena creer en ese dios?
Esperamos una explicación más creíble o digerible. Gracias. Un abrazo,
José
Por supuesto que no deberíamos emplear esa expresión ('acto puro') para referirnos a Dios. Ni esa ni ninguna otra, porque todas serían la expresión de una idea de Dios, no de Dios. Si la utilizo, es para demostrar, partiendo de la más tradicional teología, que aplicar a Dios actos puntuales no tiene ni pies ni cabeza.
Claro que Dios no puede sufrir con los que sufren. Estaría bueno que lo que es Dios dependiera de nosotros. Para Dios todo está en armonía en todo momento. El mal y el dolor que nosotros constatamos no es más que una falta de perspectiva. El mal absoluto no existe; lo que pasa es que estamos incapacitados para superar el maniqueísmo que está incrustado en nuestro cristianismo hasta los tuétanos.
De todas maneras, yo escribo y hablo, para hacer pensar, no para que el que me lee o escucha piense como yo. Sobre todo, tratándose de Dios, todo pensamiento es relativo.
Un abrazo,
Marcos

No hay comentarios:

Publicar un comentario